«¿Los haitianos comen gatos?» es una de las 10 preguntas más frecuentes que se les hacen a los haitianos en la escuela primaria, secundaria, preparatoria, universidad e incluso en entornos profesionales.
Lamentablemente, muchos haitianos se sienten incómodos al responder esta pregunta. Yo, por otro lado, no tengo este problema. Por eso, voy a revelar la verdad y compartir este pequeño secreto contigo.
¿Se comen gatos en Haití?
Comer carne de gato no es una actividad diaria ni una práctica generalizada en Haití. Sin embargo, algunos haitianos sí comen gatos el 24 de diciembre en una festividad nacional llamada «Reveyon», que es una gran fiesta navideña.
Esta es una práctica conocida exclusivamente por un grupo selecto de haitianos, principalmente de algunas aldeas rurales.
Ahora sé que tienes muchas preguntas que necesitan respuestas. Voy a intentar responder algunas de ellas aquí mismo para ti.
¿Estás listo? Vamos.
¿Por qué los haitianos comen gatos?
Contrario a las creencias populares, los haitianos no comen gatos porque sean pobres y tengan hambre. Los comen porque es una tradición.
La práctica de comer gatos en Haití no es un hábito nuevo, sino una antigua tradición que comenzó en la época de la esclavitud.
Por ejemplo, los esclavos fugitivos cazaban, mataban y comían gatos salvajes en lo profundo de los bosques y las traicioneras montañas de Haití muchos años antes de que Haití se convirtiera en una nación.
Así que la práctica de comer gato es tan antigua como Haití misma.
¿Comen los haitianos otros tipos de animales?
Sí. Los haitianos comen vacas, cabras, ovejas, pollos, cerdo, etc., pero la carne de gato es un manjar que muchos de las zonas rurales simplemente no pueden resistir.
Mira…
…tener un Reveyon sin gato es como celebrar el Día de Acción de Gracias sin pavo. A menos que seas vegetariano, algunos simplemente tienen que tenerlo.
¿Por qué? Bueno, una vez más, es una vieja tradición.
¿Por qué es legal comer gatos en Haití?
Algunos haitianos comen carne de gato libremente por tres razones:
- No existen leyes diseñadas para impedir que las personas coman gatos.
- La mayoría de los haitianos no tiene una relación tipo «humano-mascota» con sus animales.
- Algunos ven a los gatos de la misma manera que al cerdo, la carne de res y el pollo. Así que no hay discriminación.
No hay un trato preferencial. La carne es carne, ya sea de gatos o de cualquier otro animal grande.
¿A qué sabe la carne de gato?
La carne de gato en realidad sabe a pollo. Una explicación científica para esta similitud es que, debido a que muchos animales evolucionan de un ancestro común, a menudo saben igual, aunque huelan diferente.
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Cuando la probé hace unos años, esa fue exactamente mi impresión. Pero para descubrir si esto es cierto o no, tendrás que probarla tú mismo y sacar tus propias conclusiones.
¿Por qué no hay gatos en Haití?
Es mentira afirmar que no hay gatos en Haití.
Aquí está la verdad:
La relación de los haitianos con sus mascotas es diferente de lo que típicamente verías en hogares de América del Norte o Europa.
Mientras que en esos lugares los dueños de mascotas se sienten cómodos dejando a sus animales en casa o en la cama, en Haití la dinámica de la relación es completamente diferente.
Por ejemplo, usan perros para proteger sus hogares y gatos para atrapar ratones en la cocina y los jardines. Sin embargo, ahí es donde termina la interacción para la mayoría de los haitianos.
Todo ese asunto de besos y caricias que ves que la gente hace con sus mascotas en esos países de América del Norte y Europa es, en su mayoría, inaceptable en Haití.
Si ves más perros que gatos en Haití, no es porque se coman a todos los gatos. Simplemente, los perros son más valorados por su capacidad de protección.
Así que las familias haitianas no suelen tener una mascota en casa solo porque sí. No. Obtendrán un gato o un perro según la necesidad de la familia.
¿Comen gatos los haitianos en otros países?
No. La mayoría de los haitianos son personas respetuosas de la ley. Nunca robarían, matarían y cocinarían un gato en países fuera de Haití. Confía en mí en esto.
Así que si tu gato desaparece, no acuses a tus vecinos haitianos, porque las mascotas se pierden todo el tiempo.
Además, ¿deberías ahora tener miedo de la comida haitiana por esto?
¡NO!
Los haitianos nunca te servirían carne de gato sin decírtelo. Es algo tan especial que de todas formas te enterarías.
Recuerda, esto es principalmente una actividad de una vez al año, y no todos los haitianos comen carne de gato. La próxima vez que alguien te ofrezca un plato de comida haitiana o te invite a un Reveyon, adelante, disfrútalo.
Recuerda, comer gato es exclusivo de un grupo selecto de haitianos, principalmente de zonas rurales, y los haitianos no matan ni comen gatos en otros países.
Conclusión
¿Los haitianos comen gatos?
Sí. Es una tradición exclusiva de un grupo selecto de haitianos, principalmente de zonas rurales.
¿Deberías probarlo?
Tal vez. No creo que sea para todos, porque puede que te resulte repugnante.
Pero nunca lo sabrás si no lo intentas. Podría terminar gustándote mucho.
¿Qué piensas? ¿Comerías carne de gato?
Artículo original de Haitian Report.
Joana Campos es abogada y editora con más de 10 años de experiencia en la gestión de proyectos de desarrollo internacional, enfocada en la sostenibilidad y el impacto social positivo. Actualmente dirige JC Editorial, donde ha coordinado la edición y distribución de libros de reconocidos autores internacionales y la logística de numerosas giras nacionales. Anteriormente, trabajó como abogada corporativa, especializándose en derecho penal y corporativo. Joana es licenciada en Derecho por la Universidad de Guadalajara.
Joana Campos is a lawyer and editor with over 10 years of experience in managing international development projects, focusing on sustainability and positive social impact. She currently leads JC Editorial, where she has coordinated the editing and distribution of books by renowned international authors and managed the logistics of numerous national tours. Previously, she worked as a corporate lawyer, specializing in criminal and corporate law. Joana holds a law degree from the University of Guadalajara.