Postura de Trump frente al aborto puede conducir a su triunfo

El presidente Trump anunció recientemente que votaría NO a la Enmienda 4 en Florida, una medida electoral que, al igual que otras nueve propuestas en la boleta electoral en todo el país, enmendaría la Constitución estatal para permitir el aborto prácticamente sin restricciones y quitaría la capacidad del pueblo y sus representantes electos de proteger al no nacido o regular el aborto de manera razonable.

Por razones que explicaré a continuación, siempre pensé que el presidente Trump votaría en contra de la Enmienda 4.

La cadena NBC News, que se dedica a “capturar a Trump en el aborto”, comenzó la confusión con esta entrevista. Esto llevó a algunos activistas pro-vida a concluir erróneamente que la oposición a la ley de seis semanas de Florida significaba que votaría a favor de la Enmienda 4. Pero su campaña tuvo que señalar que no había dicho cómo votaría sobre la Enmienda 4. Y luego, por supuesto, nos aseguró que de hecho votaría NO sobre la Enmienda 4.

Hay varias conclusiones de esto:

1. Los líderes y activistas pro-vida tienen que dejar de usar los medios de noticias falsas como su canal de comunicación con el presidente Trump. Lo que quiero decir es que controversia tras controversia sobre su postura sobre el aborto ha sido iniciada por los medios de noticias falsas, particularmente NBC, ansiosos por atraparlo políticamente en sus palabras y erosionar el entusiasmo de los votantes pro-vida. (Aparte del mencionado anteriormente, vea aquí y aquí y aquí. ¿NBC dejará que otros tomen su turno?)

El presidente Trump no se esconde de los medios y, por supuesto, es responsable de lo que dice. Pero él no confía en los medios como su principal vehículo de comunicación con nosotros, y nosotros tampoco deberíamos hacerlo. Tiene sus propios sitios web y cuentas en las redes sociales, en las que publica declaraciones y videos con regularidad. ¡Incluso tiene su propio Grupo de Tecnología y Medios! Da discursos en manifestaciones constantemente. Deberíamos verlos. Y habla con frecuencia con los «medios paralelos», los nuevos medios de libre expresión, como vemos con X (su reciente entrevista con Elon Musk) y Rumble, sin mencionar, por supuesto, su propio Truth Social.

¿Por qué nos desorientamos tan fácilmente con los medios de izquierda, especialmente en medio de una campaña política acalorada? ¿Por qué les permitiríamos que establezcan la agenda? ¿Y por qué tantos piensan que una publicación en las redes sociales o un comentario breve en una entrevista son equivalentes a una política federal? ¿No somos más astutos que eso?

2. Entonces, ¿por qué creí que el presidente Trump votaría en contra de la Enmienda 4, a pesar de su oposición expresa a la actual ley de aborto de seis semanas de Florida? Dos razones simples.

Primero, desde que comenzó a postularse para presidente, Trump se ha opuesto abiertamente al aborto tardío. En 2016, durante su tercer debate con Hillary, Trump dijo que arrancar al bebé del útero en una etapa avanzada del embarazo “puede que a ti te parezca bien, pero a mí no”. En sus discursos sobre el Estado de la Unión y en sus mítines, Trump habló con regularidad sobre la necesidad de poner fin al aborto tardío. Utiliza constantemente el apoyo de los demócratas al aborto sin restricciones como una clara señal de que ellos, no nosotros, son los extremistas en esta cuestión.

En segundo lugar, el presidente Trump ha expresado su firme convicción de que ahora los estados deciden la política del aborto y que la decisión de cada estado debe ser respetada por el gobierno federal, por los demás estados y por todo el pueblo. Pero cuando se analiza la Enmienda 4 (y las enmiendas similares en los otros nueve estados), se ve que atan las manos de los ciudadanos y de sus legisladores, haciendo que sea inconstitucional que adopten cualquier otra medida no solo para limitar sino incluso para regular el aborto. Ahora es un “derecho constitucional”. Eso sólo fortalece a un lado del debate sobre el aborto y no muestra ningún respeto por el proceso legislativo ni por la voluntad de la gente en el futuro.

Por lo tanto, si usted cree que la gente de un estado debería poder proteger a sus hijos no nacidos, se opone a la Enmienda 4 y a las otras nueve enmiendas sobre el aborto.

3. Lo que hace la combinación de la oposición del presidente Trump tanto a la Enmienda 4 como al límite de seis semanas de Florida es dar a las personas “prochoice” “permiso” para oponerse a estas medidas electorales extremas. En otras palabras, las luchas por estas iniciativas electorales no tienen que ver con hacer que el aborto sea ilegal, sino con imponer el aborto sin límites.

Por lo tanto, la elección en Florida no es entre la Enmienda 4 y el límite de seis semanas, sino entre la Enmienda 4 y el derecho de la gente y sus legisladores a establecer el límite que quieran. Mucha gente piensa que 6 semanas es demasiado pronto, pero no 12, 15 o 20 semanas. No quieren verse limitados a una elección entre un límite de 6 semanas o el aborto hasta el nacimiento.

Si la Enmienda 4 y las otras nueve enmiendas son derrotadas, los ciudadanos de esos diez estados aún pueden establecer políticas sobre el aborto, y quienes quieran cambiar alguna ley existente pueden redactar un proyecto de ley. Las legislaturas están abiertas para trabajar. Y si no hay suficientes personas de acuerdo en que se debe cambiar la ley del aborto, bueno, bienvenidos al club. Solo hay que hacer lo que hemos tenido que hacer durante 50 años: presentar el caso a nuestros conciudadanos en un debate abierto y sólido, persuadirlos, elegir legisladores y gobernadores que estén de acuerdo, presentar proyectos de ley y presionar para que se aprueben. Pero este es precisamente el proceso que temen los partidarios del aborto, porque revelaría lo que es realmente el aborto y cuán extremistas son los demócratas al respecto.

Y eso es exactamente lo que ha estado haciendo el presidente Trump. Dios lo bendiga por ello.

Original de Priests for Life.